jueves, 10 de enero de 2008

TRABAJO A TIEMPO COMPLETO

Educar a un perro requiere mucha paciencia y mostrar una actitud predeterminada en todo momento. Educar puede resultar trabajoso mas que nada por que debemos de mantener nuestro papel de educador las 24 horas del día, por eso es un "trabajo a tiempo completo".

Es cierto que el perro aprende pronto, incluso sin que nosotros le enseñemos, en ocasiones ni siquiera nos damos cuenta de lo que hacemos, hay muchos propietarios que manifiestan que nunca le han enseñado a sentarse a su perro pero sin embargo sabe hacerlo. Todos somos capaces de aprender sin que nos enseñen. De forma inconsciente premiamos al perro cuando de forma innata muestra un determinado comportamiento, por ejemplo un perro que se sienta (simplemente porque esta mas cómodo) mientras nosotros comemos y recibe un trozo de comida (refuerzo positivo) aprenderá fácilmente a sentarse para mendigar comida. Posteriormente le pondremos nombre a ese comando y cada vez que le mostremos comida y se sentará, realmente no le hemos enseñado, simplemente el acto de sentarse de forma natural se vio reforzado por un premio en forma de alimento.

A diario de forma inconsciente actuamos de forma similar, reforzando conductas del perro que en unos casos son beneficiosas para nosotros y en otros casos no lo son tanto.

Por eso debemos de ser "educadores a tiempo completo" debemos de medir cuidadosamente nuestros actos, sobre todo durante primeros años de vida de nuestro amigo.


Vamos a formarlo, vamos a enseñarle a obedecer, vamos a imponerle una disciplina y unas normas de convivencia (al igual que nuestros padres hicieron con nosotros y al igual que sus padres harían con ellos).

De nada nos vale dedicar unos pocos minutos al día para enseñarle a que se siente, que se acueste, que se quede quieto si luego es él quien decide cuando hacerlo. Un fallo (una vez que nuestro perro ha aprendido a sentarse), que cometemos a menudo por no tener en cuenta que somos "educadores a tiempo completo" consiste en estar por la cocina o comiendo y nuestro querido amigo se sienta sin que nosotros se lo hayamos pedido y entonces........... refuerzo positivo, le damos un trozo. ¿Que ha sucedido? Sencillamente que él ha decidido cuando sentarse, cuando tener su premio esta actitud es totalmente contraproducente y un gesto tan simple marca la diferencia entre el perro que sabe sentarse y el perro que obedece a la orden de sentarse.

Lo que debemos de hacer en este caso, es no darle cuando él lo pide (se sienta sin que le mandemos) y en todo caso si queremos darle debemos decirle que se levante y mandarle volver a sentarse en otro sitio, de esta forma el premio lo recibe por obedecer.

A la hora de educar no es tan importante lo que hacemos sino como lo hacemos.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Sí al principio es un trabajo pero luego te da la mejor jubilación: cuando disfrutas de tu perro porque no te da ni un disgusto y sí muchas alegrías.

Saludos cordiales

Marta Dans dijo...

Eso es, exactamente, invertir en el presente y recoger en el futuro y para los que disfrutamos educando los avances de nuestro amigo nos aportan una gran satisfacción.

Un abrazo

La etología es la rama de la Biología que estudia el comportamiento animal en su entorno, comprende campos que van desde la genética del comportamiento hasta la ecología del comportamiento. La etología canina y su aplicación en modificación de la conducta canina debe de aplicarse en base a un rigor cientifico por expecialistas en este campo. *La diferencia de mente entre el hombre y los animales superiores, tan grande como es, ciertamente es de grado no de tipo.- Charles Darwin (biólogo).